"Despréndete de todas las impresiones de los sentidos y de la imaginación,
y no te fíes sino de la razón". Rene Descartes.
Igual yo soy muy desconfiando, pero no me gusta nada el
famoso y muy utilizado “entre compañeros no hace falta”, que además, se suele
emplear al tiempo que se alude a esa confianza y honorabilidad que debe existir siempre en las relaciones entre Letrados.
Tras esa manifestación, y más tras haber alcanzado un acuerdo sobre una cuestión o convenido un modo de proceder, ¿Cómo te opones o protestas, o pides algún documento o garantía?
Tras esa manifestación, y más tras haber alcanzado un acuerdo sobre una cuestión o convenido un modo de proceder, ¿Cómo te opones o protestas, o pides algún documento o garantía?
Lo cierto es que no es verdad, no soy desconfiado, es más, si
fuera para una cosa propia, me fiaría sin problemas del compañero que me hace
tal manifestación.
La cuestión es que detrás de este Letrado, casi siempre hay
un cliente, y respecto a este, creo que el deber profesional impone no correr
riesgo alguno con sus encargos, no dejando un pacto o acuerdo a la confianza de
que el compañero en cuestión tenga a bien cumplir su palabra.
No imagino, como explicarle a un cliente, que pacté o
convine con el abogado contrario proceder de tal o cual manera, pero que lo
hice verbalmente, porque entre compañeros normalmente se suele cumplir y la
palabra basta, pero este finalmente la ha contravenido y soslayado.
Por esta cuestión, el “entre compañeros no hace falta”, no
me gusta y no me sirve.
Muy al contrario de lo que sus valedores o defensores manifiestan, el buen compañero no es, al menos para mí, el que lo emplea, al margen de cumpla luego o no, sino el que en vez de poner en tal tesitura a un compañero, la elimina por completo, facilitando de inmediato y sin necesidad de ni siquiera pedírselo, un documento o garantía similar, que excluye esa incertidumbre y ampara el pacto alcanzado frente al cliente.
Muy al contrario de lo que sus valedores o defensores manifiestan, el buen compañero no es, al menos para mí, el que lo emplea, al margen de cumpla luego o no, sino el que en vez de poner en tal tesitura a un compañero, la elimina por completo, facilitando de inmediato y sin necesidad de ni siquiera pedírselo, un documento o garantía similar, que excluye esa incertidumbre y ampara el pacto alcanzado frente al cliente.
En fin, veremos, cuantas veces más, tendré que escuchar la frasecita.
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